Manos muertas - de Jorge Ibargüengoitia

Con las opiniones de:

David Gaxiola

Esta historia nos demuestra de una manera clara que tanto el sistema de justicia mexicano y las personas mismas que hacen los tratos con los demás no son más que un fraude que puede ser o sobornado fácilmente o sencillamente no se dan a a la tarea de hacer su trabajo bien. También nos enseña que no debemos hacer tratos en papeles que no son oficiales (como una servilleta), que debemos leer todo lo que nos dan y analizar detenidamente la información por todos sus detalles para que las cosas salgan bien y que no salgamos perdiendo nosotros cuando en realidad somos las víctimas; debemos aprender a hacer todo eso.

Jorge González

Este cuento no lo entendí muy bien, era bastante confudo todo el rollo de los terrenos, entendí que los terrenos fueron vendidos super baratos pero al final todos saliendo perdiendo ya que les quitaron bastantes metros, creo que al final hasta salieron estafados ya que tuvieron que pagar multa.

Sergio Ortiz

La historia muestra que algunas veces el sistema de justicia y hasta las personas pueden cometer muy fácilmente fraude contra ti o contra un grupo de personas o sencillamente no hacen lo que les corresponde a su trabajo. Aparte la lectura te da de enseñanza que no hagas tratos verbalmente ósea se que no sean a papel ya que es muy fácil que te timen o te estafen es mejor hacerlo a papel. Por lo que la lectura me pareció algo interesante

Amín Piñón

Este cuento es un poco estresante ya que claramente tuvo muy mala suerte la persona que compró el terreno, demuestra que no hay que confiar en todas las personas y siempre hay que sersiorarse de que lo que compras sea legitimo y que cubra todos los procesos legales.

Donovan Marmolejo

No me gustó pues todos salen perdiendo aunque en un momento me sentí bien por el hecho de que el estafador haya sido estafado, pero después de todo el termina perdiendo al igual que todos, todos menos el gobierno que al final de todo terminan siendo los más corruptos.

Vicente Sierra

A diferencia de lo que el título da a entender, Ibargüengoitia nos escribe un relato típico en México; facciones de la Iglesia hacen lo que quieren en base a su "Fé" aún cuando el Presidente Juarez peleó tanto por que esto pasara. La corrupción se encuentra a la orden del día: en la calle, en la casa, en el gobierno y hasta en la Iglesia. Todo es una mera compañía que busca solo un beneficio propio.